Es una manifestación de nuestra creencia en la solidaridad y el poder transformador del amor. Este proyecto invita a personas y empresas a convertirse en padrinos de jóvenes que no pueden costear su internación en Casa del Alma.
Ser padrino es más que un acto de caridad; es un compromiso con la vida y el bienestar de otro ser humano, es la posibilidad de ofrecer una nueva oportunidad a quienes más lo necesitan.
¿Cómo funciona el proyecto?
Los padrinos contribuyen económicamente para cubrir parcial o totalmente el costo del tratamiento de un joven en Casa del Alma. A cambio, podrán seguir de cerca el proceso de sanación de su apadrinado, con actualizaciones periódicas y una conexión directa con nuestro equipo profesional.


Responsabilidad Social – Empresarial
En este acto de apadrinamiento, invitamos también a las empresas a re-descubrir su rol en la sociedad. Ser una empresa que apadrina es trascender la lógica del mercado y adentrarse en una ética del cuidado y la compasión. Es entender que el
verdadero valor de una organización no reside solo en su éxito económico, sino en su capacidad de devolver a la comunidad, de formar parte del tejido social que cuida y protege a quienes padecen enfermedades que han sido estigmatizadas.
Las empresas que se suman a esta iniciativa no solo están invirtiendo en el bienestar de un individuo, sino también en el futuro de la sociedad.